Final de la primera vuelta con un desplazamiento a tierras murcianas, para enfrentarse a un rival bien colocado en la tabla clasificatoria y que siempre ha puesto las cosas muy difíciles en su campo.
El partido empezaba con las jugadoras amarillas intentando controlar el juego ante un equipo local que se veía sorprendido por el juego rival. El cuadro visitante se hacía con el mando, creando buenas ocasiones sin que llegara el gol, disponiendo de buenas oportunidades por parte de Carla, Verónica y Ainhoa, que increíblemente en algún caso, se quedaban en nada; hubo remates al palo o sacados por la línea defensiva, y se reclamó por parte amarilla un posible penalti que el árbitro no vio; mientras las contras murcianas eran bien solventadas por Palomares y su defensa. Así se llegaba al descanso con dominio amarillo, sin que se reflejara en el marcador, que a tenor de lo visto podía haber sido claro para las alicantinas.
El segundo tiempo comenzaba con la misma tónica, con las amarillas intentando hacerse con el mando del juego, pero las locales buscaban la velocidad de sus puntas para lanzar peligrosas contras. Así, en un balón largo se produjo un mano a mano resuelto por Palomares con la mala fortuna de que el rechace caía a una delantera murciana, que lanzaba una vaselina que, tras tocar el larguero, entraba en el marco alicantino. Las amarillas seguían luchando, y tras una buena jugada de Verónica por la banda era Ana Aráez la que lograba la igualada. Volvía el conjunto amarillo a tocar y dominar, pero nuevamente las murcianas aprovechaban una contra por la derecha para dejar sola a su delantera Saskia ante Plomares, logrando el segundo tanto. Tenían poco tiempo las amarillas para buscar por lo menos el empate, cosa que conseguían por medio de Alejandra, que cabeceaba cruzado un gran lanzamiento de falta de Carla. Este tanto daba más animo a un equipo que estaba dominando el partido, y pudo llegar el tercero, primero en un lanzamiento de falta de Blanca que golpeaba en la cercana barrera, y luego en un claro penalti a Verónica que vio todo el campo menos el árbitro y su ayudante, más pendiente del banquillo visitante que del juego.
En resumen, un empate injusto visto el dominio amarillo, en un partido en que quedó clara la mejoría del juego, falto sólo de afinar la puntería, lo que hubiera permitido una victoria; el juego da esperanzas de tener una segunda vuelta con mejores resultados. Destacar la primera convocatoria, aunque no llegaran a debutar, de las canteranas Gimena y Carrasco, otra prueba de que el Club tiene un futuro muy esperanzador. Mucho ánimo a nuestras jugadoras, y a por la victoria en nuestro siguiente partido, con desplazamiento a Elche para enfrentarnos al líder destacado.